Conviviendo Conmigo Misma

Tierra al pecho sobre la hondonada de los deseos
mi reflejo de mujer adulta
acaricia la piel del agua con dedos fríos
lo sé …
mujer de silencios y peleas soy…

A veces pierdo el rumbo,
sumergida en la vajilla de ruidos
y me escondo en la oscura mortaja de las noches sin lunas,
de madrugadas silenciosas

Tomo la vida que renace en mí con cada abrir de pestañas
y navego con la brújula
que dispone el corazón
incrustada en el alma de mis pensamientos
me desplazo por esta vida
con la vitalidad del rojo sol
que corre en mis venas

Arrellanada en el balcón del silencio a pies y manos juntas
seré ésta que vive y es feliz
a su manera

ECOLOGISTA
San Juan del Sur

Paz, armonía y bien
dones que bendicen
a los habitantes de la montaña

Al comenzar a despertar,
percibo el secreteo de aguas
iniciando pláticas mañaneras

Abro los ojos
con el entusiasmo que provoca
abrir un nuevo regalo,
abandono el tibio lecho
y me interno en la búsqueda
de la abierta y jugosa naturaleza,
que despierta con los primeros rayos de Sol

A lo lejos, vislumbro
la rasposa y compacta pared de bruñida tierra negra

Piedras blancas, cafés, negras y amarillas
todas lisas como piel de bebé
se convierten en sólido colchón
para las incesantes y peregrinas aguas
que se deslizan serpenteantes
en busca de mares más profundos

Es aquí, es ahora donde me descubro
siendo parte de un todo:
de esas aguas sinuosas,
de esos picos de montañas,
del susurro del viento que acaricia las copas de los árboles,
del café -que ha sembrado mi padre ausente -,
convertido en verde alfombra
que cubre y protege al más pequeño de los inquilinos
de esta tierra
del ardiente sol que ha vertido colores sobre mí

En este momento,
soy hormiga arando la tierra,
soy gigante abriendo el cielo,
soy cielo que se convierte en agua,
y agua que se convierte en cielo
y se derrama por la dermis del mundo y la de mis hermanos

PEQUEÑO MUELLE VENECIANO

Báñame ambarina luz
filtrada en cada poro de la cetrina piel

Bajo mis pies
crujen las tablas del muelle
parecen lamentarse de punzantes dolores…

Comienza a caer el sol
y el aire que envuelve al silencio,
me traslada a una burbuja de tiempo,
al momento de soledad que necesito para reparar el alma

Frente a mí
el mar escarchado de luz
besa una y otra vez
los viejos troncos del embarcadero

Sonidos, sensaciones e imágenes
vigorizan mi arañado espíritu
y me hacen resurgir escarchada de luz,
fresca, sana, fuerte y feliz
en este preciosa tarde,
en este puerto de sueños

NI UN PASO ATRÁS

Mi pecho es ola que golpea sobre sí,
panal de hormigas que se carcome asimismo…
siento ser alma en harapos,
mujer sin armadura

¿Y Cómo soltar tu recuerdo?
si estas mezclado en cada célula
que me contiene
en cada gota de sangre que me recorre


Pérdida en esta noche de copioso invierno
crezco con cada gota de lágrima que se derrama,
con cada apretón de garganta que asfixia,
debo soltarte de mi memoria
aunque deba volverme de revés

Emergeré algún día
en el horizonte de otros brazos que me contengan,
en la mirada abrasadora de otros ojos que me amen,
en la solidez terrena de otro pecho que me acoja

Se bifurcan los caminos, se agrandan las distancias
mandíbula apretada es la razón
que me dice: ni un paso atrás

VITALIDAD


No tengo almohada que haga reposar
la tormenta que anida en el pensamiento

Niebla hecha certeza
invade el copioso invierno
que sacude a mi alma
en estos días de inquieta vitalidad

Centellas en los ojos
ansiedad en las manos
y estas ganas de vivir
que escalan las paredes
de la piel maltrecha que clama por descansar

Y nada me importa
solo quiero vaciar por completo
el terrible desasosiego de vivir
sin las sombras
del pasado

PROMETO

Revestirme
con las galas de otro amor,
que me regale tibios abrazos
para que se le quite el frío
al alma,
cucharadas de azúcar fermentado
para calmar mi endiablada razón,
que sea suave y oloroso bálsamo
para calmar el latigado corazón,
y se vuelva grueso tronco de fornido árbol
para que no tiemble en la tempestad,
que me conserve autónoma en el proceder,
y me obsequie amplios espacios
para que mi espíritu divague melancólico,
libre en la busca del trazo perfecto
para crear los paisajes mentales
que aguardan en una esquina de la memoria
en la búsqueda de la palabra-agua,
que brota a partir de mis anhelos, que sea vendaval de determinación para luchar
por sus propios ideales, que me abrigue el corazón,
que me ame como soy


Seré para él ventosa fugaz
y amante feliz,
en el día, en la noche,
prometo romper su decoro en el silencio de las noches
horadando -juntos- la madrugada
con inquietos gemidos de placer,
masticaré con mis labios - sin vergüenzas -
su sólida y agridulce carne
y lo invitaré a la cúpula del placer,
seré toda oídos cuando así lo precise,
fuerzas cuando le falten,
confidente cuando me necesite,
silencio cuando esté “sucio de ruidos”,
compresión cuando se equivoque,
protección, ternura cuando se vuelva niño

TRISTEZA II

Mar y luna atrapadas en las pupilas
arena de luz, de sombra y de tiempo sostienen las convicciones
que me impiden retroceder
y vos atrapado en ese destello de lágrima
que salto a mi boca
dolorosamente hieres el pecho

Transpira la noche fresco rocío
que mece mi alma en abandono