Enseñanza

domingo, 13 de mayo de 2018




Tierra sobre el cuerpo marchito,
leve la estancia en esta tierra hostil

Sobre el sueño profundo y ceñida de silencio,
sabe ahora que las apariencias fueron inútiles
su nueva cama huele a moho, está húmeda
y sobre su superficie crecen margaritas en reposo
su cuerpo yace en la bóveda enmohecida
de un cementerio vacío de ilusiones y sueños

Afuera continúan las falsas apariencias,
la urbanidad caótica repleta de seres humanos
que repiten constantemente la rutina de una vida llena de miedo

Distingo a través de su vida
que la mía ¡es! ¡y será distinta!
me rehúso a unirme al desfile de zombis
que pueblan las urbes

Me vestiré de sueños, de geografías dispares, de acentos distintos
viviré sobre la espalda de una metáfora
que sueñe alegrías