martes, 18 de septiembre de 2007
Arrimada a tu hombro,
incrustada en tus ojos
descubrí el cielo sin limites
Me colgé del arpon de la luna
y desde ahí velé tu sueño
Visité tu pensamiento,
me asome al mar de tu pecho,
resbalé por tus miedos
y subí hacía tus anhelos
entonces te comprendí
Publicado por
Taza de Confidencias
en
21:35:00
Enviar por correo electrónico
Escribe un blog
Compartir con Twitter
Compartir con Facebook
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario